Eres de esas personas que por más que duerma sus horas adecuadas no descansa o sufres de pérdida de memoria, falta de atención, dolor muscular, dolor de garganta y de cabeza ¿sin razón aparente? padeces de fatiga crónica
Pues atención, puede que tu o alguien que conozcas tengan Síndrome de fatiga crónica; este síndrome aunque lleva tiempo que se ha descrito, debido a su difícil diagnóstico y su frecuente confusión con algún otro problema, suele ser mal diagnosticado o mal tratado. Por esto mismo es importante conocerlo y entenderlo.
Por definición el Síndrome de fatiga crónica es:
“Una afección compleja y debilitante caracterizada por una fatiga intensa que no remite tras el descanso en cama y que puede empeorar con la actividad física o mental.”
Desde la definición podemos ver porque es tan difícil el diagnóstico del Síndrome de fátiga crónica; hay muchas afecciones que pueden generar un estado de debilidad aumentada pero en lo que radica la diferencia y nos ayudara a diferenciar este Síndrome de fatiga crónica de otro problema es:
- Presentar síndrome de fatiga crónica por más de 6 meses sin que sea consecuencia de alguna otra alteración.
- Presentar 4 o más de los siguientes síntomas de manera recurrente dentro de un periodo mínimo de 6 meses.
además de presentar…
- Pérdida de Memoria.
- Disminución de concentración a corto plazo.
- Faringitis o Amigdalitis.
- Nódulos linfáticos inflamados o sensibles.
- Dolor muscular o articular sin enrojecimiento o hinchazón.
- Dolores de cabeza de intensidad mayor a lo antes sufrido
- Alteraciones del sueño (Dormir más o menos de lo normal sin conseguir el descanso)
- Molestias marcadas 24 horas posteriores a realizar algún esfuerzo físico leve.
Es importante darle la importancia necesaria ya sea este problema o algo similar ya que es necesario buscar atención pronta para evitar que llegue a ser incapacitante el Síndrome de fatiga crónica y si no es este síndrome identificar otros problemas similares como los siguientes que pueden tener síntomas similares pero más agresivos.
- Fibromialgia.
- Encefalomielitis mialgia.
- Neurastenia.
- Sensibilidad a sustancias químicas.
- Mononucleosis Crónica.
- Hipotiroidismo.
- Apnea del Sueño.
- Narcolepsia.
- Trastornos depresivos.
- Trastornos bipolares.
- Cáncer.
- Esquizofrenia.
- Enfermedades autoinmunes.
- Infecciones subagudas.
- Obesidad.
- Abuso de alcohol u otras sustancias adictivas.
Para concluir es importante llevar una alimentación sana y hábitos saludables; aunque no se sepa que es lo que causa a ciencia cierta este problema, el tener factores benéficos en lugar de factores de riesgo siempre nos alejaran de los medicamentos.
Pero atención tampoco le teman a los médicos y a los medicamentos así que no dejen hacer crecer un problema y vayan de manera temprana a atenderse.
Es muy importante no esperar a tener el problema y mejor prevenirlo con hábitos saludables, nunca es tarde para hacer ejercicio si acompañas con acciones positivas como el ejercicio, la alimentación, el sueño, etc. Lograrás prevenir gran cantidad de problemas no esperes más y Renuévate
Espero que te haya gustado este artículo y me ayudes a difundirlo, recuerda que puedo resolver tus dudas que dejes en la parte de comentarios.
