Adelgazar siempre a sido un tema que a muchos les preocupa. Afortunadamente cada vez existen más personas interesadas en entender la nutrición y una muestra de ello sin duda es que hoy te permitas estar aquí involucrándote con tu salud y bienestar más allá de solo buscar adelgazar.
Es primordial dejar a un lado la idea de relacionar el peso con la salud, si bien es un punto significativo a evaluar, no es el único y considero que hay otros aspectos más importantes a tomar en cuenta de los cuales hablaremos el día de hoy.
¿Por qué adelgazar no debe ser la meta más importante?
Cuándo estamos cuidando nuestro peso ya sea de forma independiente o con apoyo de un nutriólogo o especialista, tomamos en cuenta aspectos externos como: peso, talla, medidas antropometricas (perímetro de cintura, abdomen, cadera, etc.), porcentaje de grasa, porcentaje de agua, peso de nuestros músculos, grasa visceral, etc.
Tener un control de ello esta bien, nos ayuda a darnos una idea de cómo nos encontramos, sin embargo no debemos olvidar algo indispensable: ¿Cómo nos sentimos?, ¿Te sientes fuerte?, ¿Con energía? o más bien, todo el tiempo te sientes ansioso, sin saber porque lo haces, sientes que nunca hay cambio que realmente te satisfaga.
Y aunque los números puedan servirte de palancas emocionales para motivarte a mejorar tu calidad de vida debes de siempre centrarte en buscar tu bienestar y tranquilidad y ¡ojo!, que eso no se confunda con conformismo.
Tranquilidad y bienestar significa que tus objetivos personales caminen de la mano con tus metas de físicas y salud, si en algún momento empiezas a perder el camino poniendo en riesgo tu salud, entonces ¡no lo hagas!. Recuerda la razón por la que comenzaste y ponle más motivos para hacerlo que solo adelgazar, por ejemplo:
- Ganar fuerza.
- Tener más energía.
- Tener menos antojos.
- Amarme más.
Una persona delgada no necesariamente es una persona saludable
Si tomamos en cuenta que existen 2 factores por los cuáles podríamos «medir» la salud de una persona, aspectos externos e internos como los que platicamos.
Entonces consideremos que una persona se piensa delgada o que evalúa su salud tomando únicamente puntos externos como: el «peso ideal», comentarios como «que delgada estás», «tu siempre tan flaquita» o simplemente la medida de sus pantalones.
¿Qué pasa?, Esta persona no tiene medidas reales para evaluar su salud y puede tener alterado «n» cantidad de valores importantes a considerar para determinar la salud y en cuestión interna puede estar acostumbrada o puede considerar «normal» aspectos que no son normales, pero que si no haz experimentado otro estado de salud puede interpretar como: «así es cómo debes sentirte»: con constantemente inflamación, con dolores de cabeza, irritaciones, acné, reflujos, etc.
Es normal, ver personas «delgadas» comiendo muy mal como parte de su rutina y escuchar comentarios como: ¡Que envidia!, comes de todo y no engordas.
Y aunque aparentemente puedas pensar que así es, créeme una persona que no come comida real no se está nutriendo, solo está comiendo por comer y tarde o temprano su cuerpo pasará factura, puede que nunca presente obesidad pero no gozará de una buena salud.
Alimentarse no es una cuestión de gula y antojos, tiene una función y un objetivo, nos permite realizar todas las actividades diarias, y si no le brindamos alimentos de calidad estamos limitando y entorpeciendo a nuestro cuerpo.
Debes aprender a conocer tu cuerpo y saber lo que es normal y lo que no, muchas enfermedades avanzan muy lento y cuando nos damos cuenta ya es tarde, pero si hacemos retrospectiva nos damos cuenta de varias cosas que pudimos haber cambiado.
Es importante enmarcar que al decir delgada de forma coloquial no estamos considerando aspectos puntuales como los que toma un nutriólogo para evaluar la salud, como lo es el porcentaje de grasa, grasa visceral, etc.
Hablamos de que una persona considerada delgada si lleva una mala alimentación, seguramente tendrá porcentajes altos de grasa, grasa visceral, etc.
Entonces por consecuencia una persona delgada puede no ser saludable al igual que una persona con sobrepeso. Por lo tanto, el peso no define el estado de salud de una persona.
Y si sumas los aspectos emocionales que muchas veces pasamos por alto y son importantísimos para tener una salud integral, realmente entenderíamos que encasillar la salud con un número es absurdo.
Entendiendo este concepto, quiero que de hoy en adelante no te centres únicamente en adelgazar y empieces a ver la salud como algo más complejo e integral y busques tu bienestar.
Es por eso que la salud no debe tener una fecha especifica, «para la boda de mi hermano», «adelgazar para el verano» es el proyecto en el que debes de estar trabajando diariamente, no importa que vayas paso a pasito pero que sea una constante en tu vida. ¡Hay tanto por mejorar! que es triste limitarlo al peso.
La salud implica diferentes aspectos como:
- Salud Mental
- Salud Física
- Salud Emocional
Y cada una de ellas tiene diferentes formas para nutrirla y cuidarla; créeme que si procuras cuidar cada una, encontrarás mas gocé que el solo buscar adelgazar.
Te sentirás lleno de energía, con más vitalidad, fuerza, tranquilidad, paz y estabilidad. Si realmente estás buscando mejorar tu salud debes plantear una estrategia que te ayude a lograrlo de forma integral, aquí te comparto un método para poder trabajarlo. Ver Estrategia
Espero que este artículo te sea de gran utilidad y que realmente puedas empezar a cambiar tu mentalidad y disfrutar el proceso.
Con cariño