Muchas personas no solo comen y beben demasiada azúcar, sino que también está aumentando el uso de edulcorantes artificiales o sustitutos del azúcar. Afortunadamente, existen sustitutos del azúcar que realmente pueden ayudar a reducir su consumo, siempre y cuando elijas los correctos.
Aunque hay que tener en cuenta que realmente dejar la glucosa (azúcar) totalmente es imposible porque muchos de los alimentos que comemos la contienen. Entonces, lo que se debe hacer es dejar la glucosa que es altamente procesada y que está despojada de su valor nutricional real, tratando en su lugar consumir solo azúcares naturales que se encuentran en alimentos saludables y algunos sustitutos del azúcar.
¿Cómo funciona la glucosa en el cuerpo?
El cuerpo necesita glucosa o sustitutos del azúcar dado a que proporciona energía al cuerpo en poco tiempo. El cuerpo precisa suficiente energía para cubrir funciones básicas como respirar o correr. La manera en que es obtenida es mediante un equilibrio entre los macronutrientes y micronutrientes como lo son los carbohidratos, grasas, proteínas, vitaminas y minerales.
Luego los macro y micronutrientes se procesan en el estómago y los intestinos. Así la glucosa ingresa a la sangre a través de la pared intestinal y hace que el nivel de azúcar en sangre aumente rápidamente. De este modo es como la energía se pone a disposición del cuerpo.
No obstante, la glucosa natural es suficiente para este aporte energético. Cuando comemos carbohidratos, como pasta o patatas, consumimos azúcares naturales a través del almidón que contiene. También suministramos a nuestro cuerpo glucosa al comer fruta. Por lo tanto, nuestro cuerpo no necesita azúcar adicional en forma de dulces, pero esto no significa que no deba consumirse, lo importante es hacerlo haciendo uso de alternativas saludables al azúcar.
El exceso de azúcar conlleva al aumento de peso
El hecho de que la glucosa puede suministrar energía rápidamente se está convirtiendo rápidamente en un aspecto negativo. Porque, si el cuerpo no utiliza esta energía, la almacena para un tiempo posterior.
La hormona insulina, que afecta el nivel de azúcar en sangre, contribuye a esto. En el mejor de los casos, asegura que el azúcar sea absorbido por las células y se utilice inmediatamente como energía.
Si se necesita menos sustitutos del azúcar del que se suministró, este exceso de energía se convierte en grasa para que pueda estar disponible para un tiempo posterior. A medida que avanza el proceso, el nivel de azúcar en sangre desciende, lo que provoca antojos. Se vuelve a consumir azúcar y una vez más se almacena grasa. Esto da como resultado un exceso de peso.
Así es como funciona con carbohidratos simples como dulces o pan blanco. Los carbohidratos de los alimentos integrales, como los cereales integrales, se convierten más lentamente en el cuerpo.
Por lo tanto, la hormona se libera en menor medida y estás saciado durante más tiempo. Entonces, la glucosa en forma de carbohidratos saludables es buena para el cuerpo, mientras que muchos dulces pueden conducir rápidamente a un aumento de peso.
El azúcar puede afectar la salud
Aunque en ocasiones el azúcar puede ser bastante delicioso, los riesgos que representa para la salud son muchos, motivos por los cuales lo más recomendable es optar por sustitutos del azúcar.
El azúcar, en la cantidad que nosotros, como cultura, lo consumimos, es una de las sustancias más letales con las que nos hemos encontrado. En las cantidades sin precedentes que encontramos en nuestras dietas, el azúcar está contribuyendo a las peores enfermedades prevenibles que padece la humanidad: enfermedades cardíacas, cáncer, enfermedades hepáticas y diabetes.
El azúcar no es dañino solo porque tiene calorías y cero valor nutricional. En realidad, se vuelve dañino cuando se consume excesivamente, al igual que ocurre con todos los alimentos. El consumo excesivo de glucosa conlleva a un incremento del peso corporal, lo que acarrea consecuencias negativas para la salud.
Asimismo, se ha de tener en cuenta que el azúcar no es el responsable del incremento del peso en sí, lo que resulta perjudicial son las cantidades tan grandes de azúcar que se hallan en los alimentos que son muy procesados, conllevando así a que tengan un sabor muy agradable y las personas quieran comerlos en exceso.
¿Cuáles sustitutos del azúcar son recomendables?
Algunos azúcares se encuentran naturalmente en alimentos como frutas y lácteos. Otros azúcares, también llamados azúcares agregados, se agregan durante el procesamiento comercial o por ti mismo.
Los edulcorantes que no contienen azúcar suelen ser más dulces que el azúcar, pero contienen menos calorías o ninguna. Cada edulcorante tiene un sabor y gusto únicos, que a menudo es la forma en que las personas eligen el tipo que prefieren.
Si estás interesado en probar una alternativa al azúcar, echa un vistazo a estas opciones populares.
- Stevia: La planta de Stevia es naturalmente cientos de veces más dulce que el azúcar. Los extractos puros están disponibles para usar en bebidas o batidos, y solo una pizca suele ser suficiente para darle la misma dulzura que una cucharada de azúcar. Para hornear, la Stevia a menudo se mezcla con otros edulcorantes para diluirla y crear un volumen similar al azúcar tradicional. La Stevia no tiene calorías y no aumentará los niveles de azúcar en la sangre, por lo que puede ser una buena opción para las personas con diabetes o que limitan las calorías.
- Miel: La miel es el edulcorante más antiguo conocido por el hombre. Es una sustancia natural producida por las abejas y viene en muchas variedades y sabores diferentes. Es un jarabe que se compone principalmente de fructosa y glucosa, con menores cantidades de otros azúcares y agua. Es un poco más dulce que el azúcar común. Se puede usar como edulcorante por sí solo o como ingrediente en la cocina. También tiene cualidades medicinales. Además, es ventajoso por ser un producto natural sin procesar. A diferencia del azúcar refinado, no se utilizan productos químicos en su fabricación. Puede tener un excelente sabor y es muy útil en la cocina.
- Sucralosa: La sucralosa tiene un perfil de sabor muy similar al del azúcar, y su estabilidad a altas temperaturas permite su uso en la repostería casera. Además, no se metaboliza en gran medida en el cuerpo humano y es bien tolerada por personas sanas como por quienes sufren de diabetes. Al igual que con cualquier otra aditivo alimentario o suplemento nutricional, la dulzura de la sucralosa se puede disfrutar de forma segura en cantidades moderadas.
- Fruto del monje: Es otro de los suplementos del azúcar más populares además de ser muy saludable, principalmente porque no aporta calorías, lo cual es muy conveniente si estás intentando bajar o mantener tu peso corporal. Asimismo, el fruto del monje es hasta 200 veces más dulce que el azúcar convencional por lo que no tendrás conveniente al momento de utilizarlo en diversas recetas.
Y si te gusta la stevia, aquí te dejo un video de cómo prepararla para que sea más fácil de utilizar y te asegures de lo que estás dejando entrar a tu organismo.
