Decidí lo que quería hacer con mi cuerpo, logre transformar mi mente cuando descubrí todo lo que era capaz de lograr.
Al contrario de lo que muchos piensan yo comencé con la transformación de mi cuerpo al revés… Sí, primero tuve que demostrarme que era capaz de hacerlo para después querer hacerlo. La mente fue mi principal limitante, sé que en este punto muchos se van a identificar así que ojo.
Vivimos en un mundo donde muchas veces nos avientan al conformismo.
Frases como “Están así, porque no tienen nada más que hacer” o “Tienen todo un equipo atrás que hacen que estén así, es imposible” nos hacen llegar a creer y a vivir con la idea de que nosotros seremos incapaces de lograr grandes transformaciones porque fuimos destinados a ser así y no hay más.
Y aprendemos a vivir así, sin exigirnos demasiado.
La historia de mi cuerpo al transformar mi mente
Con mi cuerpo yo viví algo así…
Nunca tuve problemas de sobrepeso pero claro tampoco fui “Destinada” a nacer con “El Cuerpo ideal” o “El cuerpo de no tener nada más que hacer” jaja (como nos diríamos muchas veces) digamos que era simplemente “delgada”.
Y así viví con la idea de que era delgada y que por tal motivo no tenía problema que cuidar acerca de mi alimentación tampoco podía esperar más por que esa era mi “Complexión” y contra eso no había poder humano que pudiera cambiarlo.
En el 2011 comencé a colaborar con mi hermana apoyándola con algunas cosas de diseño y sin querer empecé a involucrarme más en la importancia de la alimentación y el poder de unos buenos hábitos alimenticios
conjugados con ejercicio.
Me gustaba, pero no me apasionaba porque además de todo, yo no tenía problema alguno ni nada que pudiera mejorar.
Bueno eso pensaba, ja.
Viví así varios meses, haciendo las cosas sin saber realmente por qué. Confieso, muchas veces las hice para no ocasionar problemas, saben… al final mi hermana lo hacía por ayudarme ¿No creen?
Les platico todo esto porque hoy me doy cuenta que muchas veces las cosas están ahí para darse, todas perfectas y todas en su lugar y somos nosotros que no las vemos… no enfocamos y por más que el mundo conspire para que lo
hagamos, si nosotros no las vemos, si no queremos, SIMPLEMENTE… ¡No las haremos!
Y después diremos “No era nuestro momento”, “No sé, simplemente no se dio” y las oportunidades están ahí todos los días, las cosas no se dan se salen a buscar y se trabajan.
Si tienes la fortuna de ya encontrarte cambiando tu cuerpo y tu mente te invito a dar el 100% a enfocarte en lo que quieres. No se trata de solo cambiar tu cuerpo créeme cambiaras tu mente y te sentirás mejor en todos los aspectos de tu vida.
¿Te gustaría que te platicara cómo logre enfocarme?